La Unión Cívica Radical dio un paso clave en su reconfiguración interna al elegir a Leonel Chiarella como nuevo presidente del Comité Nacional. El intendente de Venado Tuerto fue consagrado por amplia mayoría en el Plenario de Delegados, con 81 votos, tras un acuerdo político impulsado por los gobernadores que integran el espacio Provincias Unidas. De esta manera, Chiarella sucede a Martín Lousteau y se convierte en el presidente más joven en los 134 años de historia del partido.
La elección expresa una señal de recambio generacional y de búsqueda de una conducción con perfil de gestión. Chiarella estará acompañado por una mesa plural que incluye a dirigentes con responsabilidades ejecutivas y legislativas en distintas provincias, lo que refuerza la idea de un radicalismo federal, con anclaje territorial y capacidad de gobierno.
El acto contó con la presencia de figuras centrales del partido, como Maximiliano Pullaro, Gerardo Morales y los gobernadores de Corrientes, mientras que Alfredo Cornejo expresó su desacuerdo y decidió no integrar la nueva conducción, evidenciando las tensiones internas que aún persisten en torno a la estrategia nacional del radicalismo.
En su discurso, Chiarella planteó una línea política orientada a superar la lógica de la confrontación permanente. Reivindicó el diálogo interno, la presencia activa del partido en todo el país y una agenda enfocada en generar condiciones para la inversión, fortalecer a los sectores productivos y respaldar gestiones eficientes. El mensaje apuntó a posicionar a la UCR como una alternativa racional, moderna y basada en hechos concretos de gobierno, lejos de los extremos que dominan la escena política.
Con esta elección, el radicalismo busca ordenarse, ganar previsibilidad y recuperar protagonismo nacional, apostando a liderazgos jóvenes y a una narrativa centrada en la gestión, el desarrollo y la estabilidad institucional.