El Gobierno nacional dio un paso decisivo en su política de reducción del gasto público y eficiencia del Estado al anunciar la licitación para concesionar la explotación de Tecnópolis por un plazo de 25 años, con posibilidad de renovación. La medida, que se pondrá en marcha este lunes, apunta a transferir la operación del predio de Villa Martelli a operadores privados a partir del 1 de julio de 2026, bajo el argumento de que el espacio fue históricamente deficitario y dependiente de subsidios estatales.
La concesión se realizará mediante un concurso público nacional administrado por la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE) y contempla un canon mensual inicial de 611 millones de pesos, además de un seguro contra incendios por 60 mil millones, destinado a resguardar el patrimonio público. Desde el Ejecutivo sostienen que el esquema permitirá transformar a Tecnópolis en un espacio autosustentable, sin transferencias del Tesoro, y con mayor dinamismo en su programación.
El pliego establece que el predio deberá mantener su perfil cultural, educativo y recreativo, incorporando actividades público-privadas, talleres, deportes no competitivos y propuestas comunitarias. Para el Gobierno, la iniciativa consolida un cambio de paradigma: el Estado deja de administrar estructuras costosas e ineficientes y pasa a cumplir un rol de regulador, habilitando inversión privada para potenciar activos subutilizados.
Desde la Casa Rosada remarcan que, al asumir la actual gestión, Tecnópolis arrastraba deudas millonarias, deterioro edilicio y una baja utilización durante gran parte del año. El nuevo esquema, aseguran, permitirá aprovechar plenamente sus más de 500 mil metros cuadrados, generar ingresos genuinos y ampliar la oferta cultural sin cargar el costo sobre los contribuyentes.