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Tinogasta al Borde del Colapso: ¿Hasta Cuándo Vamos a Mirar para Otro Lado?

Calles destruidas, postes caídos, cero iluminación y negligencia total: la ciudad se hunde mientras la política juega al poder
09/12/2025 10:58 | Local
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Tinogasta está atravesando uno de los momentos más críticos de su historia reciente. No es exageración, no es pesimismo ni “hablar de más”: las imágenes y los hechos hablan solos. Postes de luz inclinados a punto de caer, zanjas abiertas sin señalizar, calles convertidas en trampas, barrios enteros a oscuras como si viviéramos en un pueblo fantasma. Y lo más grave: vidas en riesgo real, como las de los jóvenes que perdieron la vida en accidentes evitables, provocados por el estado calamitoso del espacio público y la absoluta falta de controles.

Mientras tanto, la política local —esa misma que se autoproclama gestora del “progreso”— sigue entretenida en sus rituales: juramentos, sesiones vacías, nombramientos, reemplazos como si los cargos fueran fichas de ajedrez. Todo muy prolijo, muy formal… pero totalmente desconectado de la realidad que la gente vive todos los días.

Tinogasta se cae a pedazos, y las autoridades parecen no haberse enterado.


Una ciudad en estado crítico

Los hechos recientes exponen un deterioro que ya nadie puede disimular:

Todo esto mientras las autoridades mantienen sus sueldos altos, sus reuniones a puertas cerradas y sus discursos de ocasión.
El contraste duele. Y duele más porque no hay voluntad política real de cambiar las cosas.


La decadencia más evidente de los últimos tiempos

Muchos vecinos aseguran que este es “el peor gobierno de la historia de Tinogasta”. Puede sonar fuerte, pero basta con caminar por las calles para entender la magnitud del abandono: pavimento que se hunde, barrios postergados, obras mal hechas o directamente abandonadas.

La falta de alumbrado público convierte a zonas enteras en lugares inseguros incluso para caminar.
Un simple poste inclinado puede terminar en tragedia.
Una zanja abierta puede quitar una vida.
Un cable caído puede electrocutar a un adolescente.

Esto no es casualidad: es consecuencia directa de años —y décadas— de gobiernos que jamás mostraron un interés verdadero por priorizar Tinogasta.


¿Controles de tránsito? Sólo para recaudar

La falta de control vehicular, de iluminación y de señalización hace que los accidentes sean cada vez más frecuentes. Pero cuando aparece un control, suele ser para recaudar, no para ordenar, prevenir o educar.

Mientras tanto, en las calles reina el desorden, la improvisación y el abandono.


¿Qué piensa hacer Tinogasta?

Los que se animan a decir estas cosas son tildados de “locos”, de exagerados o de gente que “critica por criticar”. Sin embargo, son justamente quienes ven lo que está pasando sin miedo a contarlo.

La pregunta final no es para los políticos: es para el lector, para el vecino, para vos:

¿Querés ver a Tinogasta mejorar o preferís verla hundirse un poco más cada día?

Porque los políticos seguirán haciendo lo mismo de siempre… a menos que la sociedad deje de ser silenciosa, sumisa y resignada.

El futuro de Tinogasta no lo deciden ellos.
El futuro lo decidimos nosotros.

Temas: #Interes #Lector

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