León XIV llamó a frenar la ofensiva en Venezuela y reiteró que quiere visitar la Argentina
En el vuelo que lo trasladó de Beirut a Roma, tras su primera gira internacional, el papa León XIV lanzó un mensaje directo a la Casa Blanca: pidió evitar cualquier operación militar contra Venezuela y favorecer una salida negociada que evite más sufrimiento para la población civil.
“Es mejor buscar maneras de diálogo, quizás presión, incluso presión económica, pero buscando otra manera para cambiar, si es lo que decide hacer Estados Unidos”, afirmó el pontífice estadounidense ante unos 80 periodistas acreditados que viajaban con él.
La declaración llega en un momento de máxima tensión diplomática, luego de que Washington intensificara sus ataques contra embarcaciones que, según denuncia, transportan droga en el Caribe y el Pacífico. Estados Unidos acusa a Nicolás Maduro de liderar una estructura criminal conocida como el Cartel de los Soles, mientras Caracas sostiene que se trata de una excusa para forzar un cambio de régimen y quedarse con el petróleo venezolano.
León XIV insistió en que la prioridad debe ser proteger a la población:
“Con la conferencia episcopal y el nuncio estamos buscando maneras de calmar la situación por el bien del pueblo, porque quienes sufren esas situaciones no son las autoridades”.
La visita a la Argentina: deseo firme, fecha incierta
Durante la misma rueda de prensa, el Papa confirmó que su próximo viaje internacional será a África y que Argelia figura entre las escalas previstas, en un gesto simbólico que combina su interés pastoral con el diálogo interreligioso.
Sin embargo, volvió a abrir la puerta a un eventual viaje a América del Sur.
“Me gustaría mucho visitar América Latina, Argentina y Uruguay, que están esperando una visita del papa”, afirmó, aunque aclaró que por ahora “no hay nada decidido”.
El pontífice expresó su deseo de visitar lugares vinculados a San Agustín en Argelia, pero también “continuar con la construcción de puentes entre el mundo cristiano y musulmán”.
Mientras tanto, el Vaticano mantiene con cautela la planificación de futuras giras, en un contexto global marcado por conflictos, tensiones geopolíticas y situaciones humanitarias complejas.
